jueves, 28 de mayo de 2009

Invertir en fondos por seguridad

Con la cantidad de atracos que se están dando en nuestras calles, cuya última expresión son los conocidos "paseos millonarios", queda en evidencia la vulnerabilidad que tienen las tarjetas de crédito y débito ante los hampones.
Por más guardada que uno tenga la clave, el individuo es obligado a darla a los delincuentes para salvar su vida.
No hay mucho que hacer cuando sucede esta desgracia.
Por lo menos, con la cuenta de ahorros se pueden tomar algunas acciones. Una de ellas es mantener el dinero en un fondo de inversión de corto plazo.
Con los modernos sistemas de transacción que existen en los bancos, el cliente puede depositar el dinero que no vaya a necesitar ya mismo en un fondo de mercado de dinero (corto plazo). Por ejemplo, puede tener ahí el dinero para el pago de la casa, o bien, el salario de la quincena y en lugar de gastarlo, utilizar una tarjeta de crédito, en el entendido de que cuando venga la fecha de corte, el cliente programará un pago de contado.
En el fondo, el dinero gana alguna rentabilidad, y de alguna manera está seguro contra los delincuentes, pues en caso de robo de la tarjeta o un "paseo millonario", ellos no podrían sacar más que el saldo que se mantiene en la cuenta para los gastos diarios.
En este sentido, habrá que ser un poco más ordenado, consultar el internet constantemente y programar los pagos, no vaya a ser que el cuentahabiente no tenga el dinero a tiempo. Hay que recordar que los fondos de inversión pagan T+1, es decir, los dineros se aplican a la cuenta un día después de que se solicita su redención del fondo.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Ahorro en la carretera

Recientemente escuché a autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Transportes asegurar que es "imposible" hacer cobros diferenciados por peaje en la carretera San José-Ciudad Colón, ahora concesionada a la empresa Autopistas del Sol, para los vecinos de esa localidad.
Este es un tema realmente importante para usuarios del servicio que van a tener que pasar todos los días por la carretera para ir a sus trabajos y que, en el mejor de los casos tendrán que pagar casi mil colones diarios, aunque podría ser más si son personas que por sus ocupaciones deben pasar varias veces al día por la misma autopista.
No sé qué tan profundamente se habrá discutido sobre el tema, pero hablando con un compañero de oficina, vimos que ciertamente sí tiene solución.
Estando la tecnología ya disponible, como el dispositivo electrónico llamado Quick Pass y que se recarga con un depósito de dinero en una cuenta del banco HSBC, es simple hacerlo. Se puede incluir una tarjeta virtual para usuarios frecuentes, en que el cliente deposita un monto específico por el uso constante de la carretera.
Se puede hacer al estilo de las tarjetas de prepago que están muy extendidas en otros países centroamericanos, donde el cliente adquiere un monto específico y la debe usar por un tiempo determinado. Por ejemplo, si se aprueba que los usuarios de este sistema paguen la mitad del monto estipulado, deben comprar una tarjeta que sea equivalente al uso que tendría durante una semana o un mes. Si la gastó antes de ese tiempo deberá adquirir otra para poder seguir manteniendo ese mejor precio, pero si no la utiliza, a su fecha de vencimiento perderá su saldo. De esta manera se garantiza que la tarjeta sea usada solo por quien realmente la va a necesitar.
Como la tarjeta es virtual, el monto se cargará directamente a la cuenta que está relacionada con el dispositivo electrónico.
Me parece que en lugar de tener una actitud negativista, las autoridades del gobierno y la empresa concesionaria deberían buscar opciones creativas para beneficio de los usuarios.